ARNOLD JOSEPH TOYNBEE
Arnold Joseph Toynbee, (14 de abril de 1889, Londres – 22 de octubre de 1975) fue un especialista en filosofía de la historia, que creó una concepción cíclica de la historia. A diferencia de Spengler, del que hablamos en otro artículo, él pensaba que una cultura que supiera resolver sus problemas sería capaz de escapar al fin natural del ciclo, que es la desaparición. Su obra clave es Estudio de la Historia, una obra de 12 volúmenes escritos entre 1939 y 1961.
Una historia cíclica y lineal de tres tiempos y medio
Como decíamos en la introducción de esta obra, Toynbee señala a una concepción lineal de la historia, o de avance, sustentada en ciclos de tiempo que giran como lo hacen las ruedas de un carro.
Estas simplemente giran sobre sí mismas, pero el resultado final es que el carro, en este caso la historia, avanza.
Veía esos momentos de aparente retroceso como períodos purificadores que permitían eliminar los aspectos negativos que impedían seguir avanzando. Era un descomponer el sistema para crear uno nuevo y semejante pero con los errores corregidos.
El método que empleamos sigue estas ideas, pues como dijimos desde el principio, cada año es diferente del anterior aunque las cuatro estaciones se siguen repitiendo.
Una concepción de historia cíclica complementa a una lineal, no son modelos opuestos. Y evidentemente, los avances técnicos y de cualquier otro tipo se heredan y se mejoran.
El caso heleno
A continuación resumimos la teoría de Arnold Toynbee a través de un ejemplo que él mismo explica, el de la civilización helénica:
En primer lugar, habla de tres períodos:
– Un “Tiempo de Angustia” que lleva a la forja de un gran imperio, y que en el ejemplo, iría desde el 431 al 31 AEC,, durando unos 400 años.
– Un “Estado Universal”, que trae paz, y se refiere al Imperio Romano hasta el año 180 EC.
– Un “Interregno”, que supone la descomposición del imperio creado hasta su disolución, iría desde el año 378 al 475 AEC.
Notemos que el intervalo abarcado es de unos 900 años aproximadamente, y tiene tres fases: subida (400 años), meseta central (200 años) , y descenso (300 años).
Puesto que se han fijado dos momentos de ruptura y recuperación (180 EC y 378 EC), el historiador busca un tercer momento de crisis, hallándolo en el 218 AEC, y configurando un esquema de “tres tiempos y medio” donde sel ritmo sería: caída-recuperación, caída-recuperación, caída-recuperación, y caída final.
Primer tiempo (431-218 AEC, 213 años)
a) Caída: comienza con un colapso general y una entrada en un llamado “tiempo de angustia” en el que se forman estados fragmentarios o parroquiales.
b) Recuperación: Le sigue una recuperación consistente en la pacificación de las guerras que han llevado a la formación de esos estados.
Arnold habla de las guerras intestinas iniciales entre los estados griegos, como Atenas y Esparta, durante las Guerras del Peloponeso (431-404 AEC). Posteriormente se llega a una época de estabilidad que se materializa, por ejemplo, en la unidad alcanzada por el Imperio Macedonio.
Segundo tiempo (218 AEC-180 EC, 398 años)
a) Caída: los estados parroquiales o fragmentarios luchan entre sí por la supremacía.
b) Recuperación: los estados fragmentarios son absorbidos y se forma un “estado universal”.
A. Toynbee se refiere a las nuevas luchas surgidas con las Guerras Púnicas, en concreto con la segunda (218-201 AEC). Posteriormente, se funda el Imperio Romano (31 AEC), que vuelve a unificar los territorios. Menciona de pasada la “caída” del año 69 EC, como un evento puntual.
Tercer tiempo (180 EC- 378EC, 198 años)
a) Caída: crisis del estado universal.
b) Recuperación: restablecimiento del orden en el estado universal.
El escritor relaciona esta fase a la crisis generada con la muerte del emperador Marco Aurelio (180 EC). Luego habrá otra unificación en tiempos de Diocleciano.
Medio tiempo (378-475EC, 97 años)
a) Caída final: destrucción del estado universal, creación de estados sucesores bárbaros, y desintegración de la sociedad.
Se data entre la Batalla de Adrianópolis (378 EC) donde los godos vencieron a los romanos, y la caída de Roma. Invasión de pueblos germanos y formación de Reinos Germanorromanos.
Así, esta manera de contar el tiempo sería de 200, 400, 200 y 100 años, que de nuevo nos lleva a unos 900 en total.
Nuestro método usa cantidades semejantes pero en un esquema más sencillo y simétrico como veremos.
Ahora bien, sobre si una cultura está destinada a desaparecer o puede escapar del ciclo inevitable ¿Tendrá razón el Spengler o Arnold Toynbee? ¿Esta nuestra cultura destinada a desaparecer como todas las anteriores? ¿Seremos capaz a diferencia de nuestros antecesores de encontrar la clave que nos permita superar nuestras diferencias y romper este ciclo?
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